Desde nuestra perspectiva, el insomnio o la dificultad para dormir es una de las condiciones más peligrosas a largo plazo que sufren las personas. La cantidad y calidad apropiada de sueño son factores vitales que influyen en la capacidad inherente del cuerpo para poder funcionar efectivamente, regenerarse e incluso sanar.
La capacidad máxima del sistema para sanar, reparar y controlar sus funciones va a ocurrir cuando la persona alcanza un nivel normal de sueño profundo.
Muchos doctores tradicionales usualmente prescriben medicinas para “ayudar” a las personas a dormir, sin embargo esos medicamentos pueden ser peligrosos por 2 razones importantes: 1. Pueden convertirse en adictivos y 2. De acuerdo a muchos estudios científicos, estos medicamentos/drogas producen un “falso sueño” donde la persona nunca alcanza el sueño profundo que es tan vital para la reparación y regeneración celular.
Se ha demostrado que la razón número uno por la cual la gente sufre de insomnio es la dificultad de manejar el estrés.
Y los estudios alrededor del mundo han comprobado que la quiropráctica ayuda al cuerpo a adaptarse más efectivamente al estrés cotidiano de la vida. Una de las primeras reacciones más comunes que nos reportan nuestros miembros después del primer ajuste quiropráctico es que han dormido mucho mejor.
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